sábado, 29 de julio de 2017

ULTRAVIOLETAS, ,,,consejos

  
Complicaciones oftalmológicas de la exposición a luz ultravioleta y azul violeta

Advertencia sobre los peligros potenciales de la exposición a luz ultravioleta y azul violeta y resumen sobre las medidas preventivas más comunes.

La luz es parte del espectro electromagnético, que va desde las ondas de radio hasta los rayos gamma. La luz visible no es diferente a otros componentes electromagnéticos, salvo que el ojo humano puede detectar las ondas visibles.

La luz puede clasificarse según la longitud de onda, no todas son visibles. El ojo humano puede ver luz con longitud de onda entre 380-780 nm. La longitud de onda menor a 380 nm se denomina ultravioleta y la mayor de 780nm es la infrarroja.



A su vez, la luz ultravioleta se divide en UV C (100-280 nm, onda corta), UV B (280-315 nm, onda media) y UV A (315-380nm, onda larga). El sol es la única fuente de luz UV. Los rayos UV C son filtrados eficazmente por la capa de ozono y la atmósfera. Los UV A y UV B penetran la atmósfera y llegan a la superficie.

Los factores que afectan la transmisión de los rayos UV son:
1.- La elevación del sol. La radiación es más elevada a mediodía y en verano. Sin embargo, como los ojos se encuentran ubicados dentro del hueso orbital, la luz de mediodía llega menos que en otros momentos del día.
2.-Latitud: Las regiones cercanas al Ecuador reciben mayor radiación UV.
3.- Nubes: Los rayos UV A y B pueden penetrar nubes poco densas. La densidad afecta los niveles de transmisión de radiación UV.
4.- Altura: En alturas elevadas la atmósfera es más delgada y absorbe menos radiación UV, permitiendo que más luz UV llegue a la tierra.
5.- Ozono: El ozono absorbe la radiación UV C. Dicho mecanismo es cada vez menos eficiente ya que la capa se está reduciendo.
6.- Refracción del terreno: El pasto, la tierra y el agua reflejan menos del 10% de la radiación UV que llega a la tierra, la nieve refleja hasta 80%, la arena seca alrededor de 15 % y la espuma del mar alrededor de 25%.

La longitud de onda adyacente a UV A es lo que llamamos luz azul (también conocida como alta energía visible), con aproximadamente 380-500 nm. La mayor parte de la luz azul, junto con otra luz visible, se trasmite a través de la córnea y el cristalino hasta alcanzar la retina.



Es esencial para realizar una serie de funciones visuales como percibir objetos de distinto color y el contraste a nuestro alrededor.

La luz azul turquesa, con una longitud de onda cercana a la luz verde, sirve para regular los ciclos circadianos y a su vez mantiene y regula funciones no visuales como la memoria, estado de ánimo y equilibrio hormonal.

La luz azul violeta, está cercana a la luz ultravioleta y por lo tanto tiene alta energía (inversamente proporcional a la longitud de onda). Un exceso de luz azul violeta es peligroso para la retina humana, si se expone durante largos periodos, ya que irradia demasiada energía.



La luz ultravioleta (principalmente la UV B) es absorbida por la córnea, párpados y conjuntiva. La absorción crónica de dicha luz puede provocar foto queratitis. Si además se expone la córnea a arena y polvo se produce queratopatía climática en gotas, proceso degenerativo que se caracteriza por un material amarronado traslúcido en la córnea, membrana de Bowman y sub epitelio. Estos depósitos se acumulan nublando la visión y pueden infiltrar el epitelio y la conjuntiva causando dolor.

La absorción de luz UV puede causar problemas como pterygium y pinguecula. La absorción en los párpados es factor de riesgo de cáncer (carcinoma y melanoma).

La exposición crónica del ojo a luz UV A puede promover el desarrollo de cataratas. Las cataratas, normalmente se extraen quirúrgicamente y se reemplaza el cristalino por una lente intraocular. Dicha lente no llega a filtrar la luz UV como el cristalino, por lo cual la retina queda más expuesta a los efectos de dicha luz.  Esto puede conducir a desarrollo de foto retinitis y aumenta la probabilidad de degeneración macular. El daño es aún peor si no se colocan lentes intraoculares, se ha sugerido que las LIO color amarillo podrían proteger un poco mejor la retina.

Las personas que trabajan al aire libre, expuestos al sol por mucho tiempo son más vulnerables al daño de la luz UV y azul violeta.



La luz azul no es absorbida por las estructuras anteriores de ojo y llega al segmento posterior dañando la retina. La degeneración macular es la forma más grave de daño retiniano debido a exposición a luz azul. Asimismo, el daño aumenta al extraer el cristalino ya que tanto la luz UV A como la luz azul violeta alcanzan la retina. Los pacientes albinos tienen mayor riesgo ya que la melanina bloquea, impidiendo que ingrese la luz en el iris.

El ojo humano tiene mecanismos internos para filtrar la luz UV y azul violeta, mediante la cornea, el cristalino y los pigmentos maculares. Sin embargo, estos mecanismos no siempre aportan la protección adecuada contra los efectos dañinos de la luz UV y azul violeta. Se ha informado, que a partir de los 65 años, la capacidad del ojo de protegerse contra dicho daño se reduce a la mitad.

Las personas que trabajan al aire libre, expuestos al sol por mucho tiempo son más vulnerables al daño de la luz UV y azul violeta. Lo mismo ocurre con lugares iluminados con luz fluorescente, blanca, fría y aquellos en donde se utiliza la luz azul para desinfectar como hospitales y laboratorios, el daño de la luz azul violeta es acumulativo.



Algunas medidas preventivas:
1.- Reducir la exposición a luz azul dejando los dispositivos digitales fuera del dormitorio para proteger el ritmo circadiano.
2.- Limitar el uso de dispositivos electrónicos: descansar con frecuencia para evitar la fatiga visual  y minimizar el efecto acumulativo de la luz azul sobre la retina.
Los estudios indican que 60% de las personas pasan más de 6 horas por día frente a un dispositivo digital.
3.- Utilizar filtros en los lentes que filtren la luz azul violeta y UV.
4.- Utilizar luz halógena para evitar la luz blanca fría de interior.
En el exterior
1.- Limitar la exposición al sol dentro de lo posible.
2.- Utilizar gorras con visera, al estar al sol.
3.- Considerar el uso de lentes polarizados pigmentados con melanina. Aunque cambia la percepción de color, reduce la exposición a la luz azul violeta.
4.- Para los soldadores la protección es fundamental


La luz azul tiene efectos positivos y negativos. Mientras que la luz azul turquesa regula el ritmo circadiano, la luz azul violeta tiene efecto acumulativo sobre la retina y puede estar asociada a la degeneración macular. Es fundamental proteger la visión contra los efectos nocivos de la luz UV y azul violeta. Utilizar lentes adecuados cuando se trabaja al sol y evitar el uso excesivo de dispositivos que son fuente importante de luz azul violeta podría ayudar a reducir los efectos nocivos de la luz azul violeta sobre el ojo.



Desde un punto de vista simplista pero didáctico, casi todo es bueno en su justa medida; los excesos de luz ultravioleta sobre nuestra piel y ojos son dañinos. Protegerte es tu obligación, y nuestro consejo.

OFTALMÓLOGO ESTEPONA


viernes, 28 de julio de 2017

OCRIPLASMINA, 35% eficacia


Cierre de agujero macular con ocriplasmina
Evaluación de las características preoperatorias de pacientes con agujero macular idiopático y adhesión vitreomacular tratado con ocriplasmina en los que se puede predecir el cierre de dicho agujero.

La ocriplasmina ha sido aprobada para el tratamiento de pacientes con adhesión vitreomacular sintomática, incluyendo aquellos con agujero macular idiopático. La eficacia de la ocriplasmina ha sido demostrada en dos ensayos clínicos en fase 3.



Los estudios post marketing no coincidieron con dichos resultados, la proporción de cierre de los agujeros fue menor y hubo menor concordancia con el tamaño del agujero. En el presente estudio, se recopiló información de pacientes con agujero macular idiopático y adhesión vitreomacular tratados con ocriplasmina para evaluar si algún parámetro sirve para predecir el cierre del agujero.

Se recopiló información sobre todos los pacientes (33) con agujero macular idiopático tratados con ocriplasmina en tres centros oftalmológicos británicos. Se registraron diversas variables, como diámetro del agujero macular idiopático en la base, diámetro lineal mínimo, y ancho de la adhesión vitreomacular; mediciones realizadas mediante tomografía de coherencia óptica de dominio espectral. En cuanto al resultado, se registró la liberación de la adhesión vitreomacular y el cierre del agujero.



Cuando el tratamiento con ocriplasmina da resultado, el 50% de los pacientes recuperan tres o más líneas de visión y se evitan los efectos colaterales de la vitrectomía, incluyendo el desarrollo de cataratas. Sin embargo, se trata de un tratamiento costoso con posibilidad de complicaciones como desprendimiento de retina, observado en dos pacientes de esta serie y pérdida de visión aguda con disfunción retiniana externa. Por lo tanto, es importante identificar las características que puedan ayudar a predecir el éxito del tratamiento.

El porcentaje general de cierre es de 35 %, similar al obtenido en otros estudios. Es importante destacar que se descubrieron características morfológicas que en gran medida sirven para predecir el cierre: lo que llamamos factor anchura: diámetro de base menos diámetro lineal mínimo. Cuanto menor el diámetro de base, relativo al diámetro lineal mínimo, mayores las probabilidades de cierre.



El diámetro de base solo logró predecir en menor grado el cierre y el diámetro lineal mínimo no sirvió significativamente para predecirlo, aunque no se incluyeron pacientes con agujeros >400 µm. Asimismo, se excluyeron pacientes con membrana epirretiniana, ya que está asociada a la no liberación de la adhesión vítreo retiniana. 

No hubo ningún paciente que experimentara el cierre sin liberación de la adhesión vítreo retiniana. Hubo 8 pacientes en los que a pesar de la liberación de la adhesión no se cerró el agujero. Probablemente, en estos pacientes hubo otros factores que incidieron en la persistencia del agujero como tracción tangencial relacionada con restos de tejido vítreo en la membrana limitante interna.



La membrana limitante interna contribuye significativamente a la rigidez de la retina y al extraerla mejora el agujero macular. Podría existir una interacción entre el tamaño del agujero macular y las características de la membrana limitante interna, que define si el cierre puede producirse con la liberación de la adhesión o si requiere además el pelado de la membrana limitante interna mediante cirugía.

Otro factor derivado del diámetro de base, el índice de agujero macular, sirvió para predecir la liberación de la adhesión vítreo retiniana. Cuanto más angosto el diámetro, relativo a la altura del agujero, mayor probabilidad de liberación de la adhesión. La asociación con el índice de agujero macular indica que los agujeros con fuerzas de tracción mayores sueltan más rápido la adhesión vitreomacular.

Existen otros factores que pueden afectar la adhesión vitreomacular e impedir su liberación como la dosis de ocriplasmina que llega al lugar de la adhesión y la proliferación celular local en la zona de la adhesión, esto no puede detectarse mediante OCT.



Se descubrió que el factor anchura, calculado restando el diámetro lineal mínimo al diámetro de base, fue un factor de predicción importante de cierre del agujero en pacientes con agujero macular idiopático tratados con ocriplasmina. Es necesario seguir investigando para confirmar estos resultados.

Buenos resultados; en buena medida evitaremos la cirugía.


OFTALMÓLOGO ESTEPONA


jueves, 27 de julio de 2017

OCT y DIABETES


La pérdida de células ganglionares de la retina relacionada con la diabetes comienza temprano
La pérdida de células ganglionares de la retina debido a la diabetes tipo 1 comienza en la primera infancia y es detectable por los PTU antes de que aparezca cualquier signo de retinopatía diabética.

Se incluyeron 60 niños con diabetes tipo 1 sin retinopatía diabética y 60 controles igualados sin diabetes. La edad en ambos grupos osciló entre 10 y 17 años. La tecnología OCT de dominio espectral se utilizó para medir el grosor de la capa plexiforme interna de la célula ganglionar (GC-IPL) y el grosor de la capa de fibra nerviosa de la retina (RNFL).



Los niños con diabetes tenían un espesor de GC-IPL significativamente menor en todos los cuadrantes, excepto en el cuadrante nasal superior, en comparación con los niños sanos. RNFL espesor fue comparable en ambos grupos. Se encontró una correlación inversa entre el nivel de glucosa en sangre y el grosor de GC-IPL en ciertos cuadrantes de pacientes con diabetes, mientras que no se encontró correlación entre la duración de la diabetes y el grosor de GC-IPL o RNFL.

Según los autores, estos datos sugieren que sólo las células ganglionares se ven afectadas en las primeras etapas de la diabetes tipo 1, mientras que los cambios en el espesor RNFL se producen en la edad adulta. La correlación temprana con el nivel de glucosa en sangre, por otro lado, destaca la importancia del control de la glucosa en la sangre con el tratamiento intensivo con insulina para la diabetes tipo 1 durante la primera infancia.



Este estudio también pone de relieve el valor de SD-OCT como un medio para detectar cambios estructurales tempranos en la retina que pasaría sin ser detectado mediante exámenes oftalmoscopicos.


Los autores sugirieron que "la disminución del GC-IPL espesor resultados de los efectos neurodegenerativos sobre la retina que probablemente se producen antes de la vasculopatía en las primeras etapas de la diabetes infantil" y dijo que se necesitan más estudios para verificar estos resultados.

Seguimos avanzando; las simples retinografías son importantes, pero hay que prevenir antes.


OFTALMÓLOGO ESTEPONA

jueves, 13 de julio de 2017

UNO MÁS



Roclatan cumple el criterio de valoración primario de eficacia en el estudio de fase 3

Roclatan, un medicamento de combinación de dosis fija, una vez al día, para reducir la PIO, ha logrado su objetivo primario de eficacia en el estudio Mercury 2 en fase 3, anunció Aerie Pharmaceuticals .

El ensayo de 90 días comparó Roclatan - una combinación de Rhopressa (solución oftálmica de netarsudil 0,02%) y latanoprost - con monoterapia de cada uno de sus componentes. La PIO se midió tres veces al día a las 2 semanas durante 6 semanas y 90 días. Roclatan redujo la PIO entre 1,5 mm Hg y 2,4 mm Hg más que el latanoprost solo, y entre 2,2 mm Hg y 3,3 mm Hg más que la Rhopressa sola.




La PIO diurna media se redujo a 16 mmHg o inferior, en el 56% de los pacientes.

"Con estos datos positivos de Mercurio 2, tenemos ahora dos ensayos exitosos para Roclatan. Los resultados de eficacia de línea superior demostrados en Mercurio 2 son consistentes con Mercurio 1, lo que confirma el potencial de Roclatan para convertirse en la terapia de reducción de PIO más eficaz para entrar en el mercado, si se aprueba ", dijo Vicente Anido Jr.

La compañía planea presentar una nueva solicitud de fármaco a la FDA en la primera mitad de 2018 si los resultados de seguridad del juicio Mercury 1 son exitosos.




Un nuevo colirio del arsenal farmacéutico ya existente. Nuestra enhorabuena, pero necesitamos ir a patogenia, y a neuroprotectores; lo demás es superfluo.


OFTALMÓLOGO ESTEPONA